dimecres, 28 de gener del 2009

MUERE LENTAMENTE..

Muere lentamente quien no viaja, quien no lee,quien no oye música,quien no encuentra gracia en si mismo.

Muere lentamente quien destruye su amor propio,quien no se deja ayudar.

Muere lentamente quien se transforma en esclavo del hábito,repitiendo todos los dias los mismos trayectos,quien no cambia de marca, no se atreve a cambiar el color de su vestimenta, o bien no conversa con quien no conoce.

Muere lentamente quien evita una pasión y su remolino de emociones, justamente estas que restauran el brillo a los ojos y restauran los corazones destrozados.

Muere lentamente quien no gira el volante cuando está infeliz con su trabajo, su amor, quien no arriesga lo cierto o lo incierto para ir detrás de un sueño, quien no se permite una vez en su vida huir de los consejos sensatos.

¡ Vive hoy, arriesga hoy, hazlo hoy, no te dejes morir lentamente, no te impidas ser feliz !

PABLO NERUDA.

5 comentaris:

Jose Manuel ha dit...

Y dime Nuria. ¿Pones en práctica estos sabios consejos?

Juanra ha dit...

Sabios consejos, Nuria. No son fáciles de aplicar siempre (bueno, algunos sí: si es por leer y escuchar música yo moriré rapidísmo, jajaja) en el fondo somos unos cobardes. Quizá la clave está en tenerlos siemrpe presentes y aplicarlos en el momento adecuado.
Me molan las reflexiones sobre la felicidad. Si me tuviera que llevar sólo un libro a una isla desierta serían unos pocos fragmentos de Epicuro (sus obras completas son apenas 60 páginas, ya que muchas de ellas se perdieron en el incendio de la Biblioteca de Alejandría, la mayor putada de la humanidad). Hay tanta sabiduría en sus palabras que con sólo leerlas ya se es feliz, por lo menos yo. Para este sabio griego la amistad y la sabiduría son los bienes más preciados del hombre, por eso no me resisto a compartir sus reflexiones con vosotros (las hubiera copiado en una entrada nueva, pero no quería chafar las estupendas recomendaciones de Neruda que ha copiado Nuria):
[Sobre la muerte] Acostúmbrate a pensar que la muerte no tiene nada que ver con nosotros, porque todo bien y todo mal radican en la sensación, y la muerte es la privación de la sensación. De ahí que la idea correcta de que la muerte no tiene nada que ver con nosotros hace gozosa la mortalidad de la vida, no porque añada un tiempo infinito sino porque quita las ansias de inmortalidad. (…) Pues no hay nada temible en el hecho de vivir para quien ha comprendido auténticamente que no acontece nada temible en el hecho de no vivir (…) Así pues, el mal que más pone los pelos de punta, la muerte, no va nada con nosotros, justamente porque cuando existimos nosotros la muerte no está presente, y cuando la muerte está presente entonces nosotros no existimos. Por tanto, la muerte no tiene nada que ver ni con los vivos ni con los muertos, justamente porque con aquellos no tiene nada que ver y éstos ya no existen. (Carta a Meneceo)

- Ningún gozo es malo en sí mismo, pero los actos causantes de determinados gozos conllevan muchos más dolores que gozos.
- De todos los medios de los que se arma la sabiduría para alcanzar la dicha en la vida el más importante con mucho es la amistad (de Máximas capitales)

- La necesidad es una mal pero no hay ninguna necesidad de vivir sometido a una necesidad.
- Nacemos una sola vez y dos no nos es dado nacer y es preciso que la eternidad no nos acompañe ya. Pero tú, que no eres dueño del día de mañana, retrasas tu felicidad y, mientras tanto, la vida se va perdiendo lentamente por ese retraso, y todos y cada uno de nosotros, aunque por nuestras ocupaciones no tengamos tiempo para ello, morimos.
- Si se prescinde de la contemplación, de la conversación y trato con la persona querida se desvanece toda pasión erótica.
- Quien un día se olvida de lo bien que lo ha pasado se ha hecho viejo ese mismo día.
- toda amistad es por sí misma deseable, pero recibe su razón de ser de la necesidad de ayuda.
- No debemos perder los bienes presentes por el deseo de los ausentes, sino que debemos darnos cuenta de que éstos que tenemos ahora estaban también entre los solicitados.
- Debemos hacer la jornada siguiente mejor que la anterior, mientras estamos de camino, y, una vez que lleguemos al final, estar contentos igual que antes.
- Hay que liberarse de la cárcel de la rutina y de la política.
- También en la moderación hay un término medio, y quien no da con él es víctimas de un error parecido al de quien se excede por desenfreno.
- Compartamos los sentimientos de los amigos no llorando sino preocupándonos por ellos.
- Nada es suficiente para quien lo suficiente es poco.
- En una disputa entre personas amantes del razonamiento gana más el que pierde, debido a que aprende más que nadie. (de Sentencias vaticanas)

Unknown ha dit...

A mí me mola más Epicteto.
El concepto que tiene él de la buena vida no consiste en seguir una larga lista de preceptos, sino en poner de manifiesto acciones y deseos en armonía con la naturaleza. No es cuestión de llevar a cabo buenas obras para granjearse el favor de los “dioses” o la admiración de los demás, sino de alcanzar la serenidad interior y con ella la libertad personal perdurable. Para Epicteto tener una vida plena y feliz consiste, primero descubre lo que quieres ser; luego haz lo que tengas que hacer.

Juanra ha dit...

Epícteto es de la escuela estoica. No he leído nada suyo, pero sí de Séneca (y tengo pendientes las "Meditaciones" del emperador Marco Aurelio). A mí no me mola mucho el rollo de la ataraxia, la negación de las pasiones, la obsesión por estar guiados sólo por la razón para conseguir la virtud. En cambio sí que comparto (y en esto coinciden con los epicúreos) el afán por llevar una vida sencilla y austera. El epicureísmo es más hedonista.

Unknown ha dit...

Juanra, no creo que una corriente filosófica sea mas importante que otra o mejor. Yo creo que lo importante es saber lo que uno mismo quieres ser, a veces no es fácil, pero se puede empezar por saber lo que no se quiere ser. Eso sí, en cualquiera de los dos casos hacer lo que se tiene que hacer, que todo sea dicho,tampoco es fácil a veces.